HUMIRA se creó usando la tecnología de visualización de bacteriófagos; el resultado fue un anticuerpo con cadenas humanas derivadas pesadas y ligeras, variables según las regiones humanas. HUMIRA posee anticuerpos que se encuentran normalmente en el cuerpo humano. Trabajan bloqueando una proteína llamada factor alfa de necrosis tumoral (TNF-a), que juega un papel fundamental con la respuesta inflamatoria de enfermedades autoinmunes como la artritis reumatoide.